Con el conflicto salarial solucionado, los freaks que seguimos la NFL volvimos a respirar tranquilos: la temporada 2011-12 se juega.
A poco más de una semana del arranque de la pretemporada (jueves 11/08), el arreglo permite que los equipos vuelvan a las negociaciones para rearmar sus planteles de cara a la nueva campaña, que ya está al caer.
En este plano la franquicia que más ruido está haciendo por su activismo en la contratación de jugadores son, sin dudas, los Philadelphia Eagles.
Primero, porque se quedaron con la joyita del mercado de agentes libres, el esquinero Nnamdi Asomugha, que viene de Oakland y es considerado uno de los dos mejores de la liga en su posición (junto con Darrelle Revis de los Jets). Además de Nnamdi, los Eagles tradearon a su mariscal de campo suplente Kevin Kolb a los Arizona Cardinals a cambio del también esquinero Dominique Rodgers-Cromartie, otra de las estrellas de la posición. Como además ya disponían de Asante Samuel (42 intercepciones en 8 temporadas en la liga), ahora tienen un cuerpo de esquineros verdaderamente de elite, que hará a los mariscales de campo rivales pensar dos veces antes de lanzarles la pelota.
Para reemplazar a Kolb, Philadelphia agregó a su plantilla a Vince Young, que había sido dejado libre por los Tennessee Titans por problemas de conducta. Es un jugador de innegables cualidades, con un estilo de juego muy parecido al del titular Michael Vick, y que le da a los Eagles flexibilidad para mantener su estilo de juego si quieren darle descanso a su quarterback estrella.
Los Eagles también sumaron al ala defensiva Jason Babin (otro que viene de Tennessee) y al tackle defensivo Cullen Jenkins (campeón con Green Bay) para reforzar una defensa que fue su talón de Aquiles durante la campaña pasada y que les costó la eliminación de los playoffs contra Green Bay.
Con las nuevas adquisiciones la defensiva de Philadelphia se convierte, al menos en los papeles, en una de las unidades top de la liga. Defensa que queda empardada con uno de los ataques más poderosos de la NFL , y que volverá a ser comandado por Vick, letal por aire y por tierra; secundado en la versatilidad del corredor LeSean McCoy, que corre, atrapa y bloquea; y con armas formidables por aire, tanto entre las alas abiertas como en el ala cerrada, Brent Celek. Así Philadelphia consiguió ensamblar un verdadero equipazo y se convierte en uno de los favoritos junto a los campeones Packers y otros candidatos como los New England Patriots o los New York Jets.
La nota negativa es que su receptor estrella DeSean Jackson está disconforme con su salario y todavía no se presentó a los entrenamientos, exigiendo una reestructuración de su contrato. Jackson, uno de los jugadores más desequilibrantes y espectaculares de toda la liga (acá pueden ver lo que hizo el año pasado contra los Giants, en la que fue elegida la mejor jugada de la temporada), cobraría este año apenas US$ 565.000, una verdadera bicoca para semejante crack.